Se trata de una iglesia de origen conventual (franciscano-capuchino) situada en el Llano de la Fuente, de donde procede su denominación popular como “Iglesia del Llano”. Presenta una sola nave que se ensancha en el crucero, dando lugar a la habitual planta en cruz.

Cabe destacar la torre-campanario de influencia mudéjar, originaria del s. XVI, así como el patio trasero, que pertenecía al antiguo convento, y que tiene un jardín rodeado de pequeñas fuentes.

Recientemente se han llevado a cabo obras de rehabilitación destinadas principalmente a consolidar estructuras, sobre todo en las cubiertas (en estado de bastante deterioro) y en las estancias en torno a la sacristía y el campanario.